FICHA

TÉCNICA

 

TÍTULO

1974

 

SUBTÍTULOS

Inglés

 

AÑO

2016

 

FORMATO DE NEGATIVO

8MM

PAÍS

México

 

FORMATO

Color  |  B & N

GÉNERo

Horror  

 

ASPECTO

1.78:1  

DURACIÓN

82 min  

 

SONIDO

5.1  

IDIOMA

Español  

 

1974

 

“El horror es una fuerza que siempre me ha llamado,es ahí donde exorcizo y exploro la oscuridad que me habita...

 

 

Como género cinematográfico, el horror me impresiona por su fuerza impecable para conmocionarnos y ponernos delante de posibilidades que en la cotidianidad evitamos. En 1974 quería explorar esa fuerza, un horror sofisticado y elegante que colocara al espectador frente a sus propios terrores, y qué más terror que el acecho de lo desconocido... por eso durante la película busqué mantener esa tensión, podría desde el principio resolver la incertidumbre creando monstruos, pero era importante no revelar nada hasta el final, porque ningún monstruo que yo cree va a ser mayor a los monstruos y demonios que cada persona trae dentro. Al colocarnos delante de sucesos inesperados, surgen las preguntas vitales que nos hacemos siempre que vivimos alguna experiencia que nos golpea, ¿qué pasó? ¿por qué pasó esto? ¿qué significa esto?... 1974 es una invitación a los espectadores para que vayan e indaguen ese lugar propio, ese fondo oscuro que nos aterroriza, ahí donde se encuentra el tesoro más preciado: lo que somos”. 

Victor Dryere |  Director

 

#1974HORROR

 

Una soledad y extrañeza, vividas al filo de lo desconocido, han impulsado a Victor Dryere a hacer películas como la única vía de multiplicación y supervivencia. 1974 es un portal que explora eso desconocido que reside y nos acecha en la oscuridad más profunda de lo que somos. La idea de la película comienza cuando el director encuentra el proyector súper 8mm de sus abuelos y proyecta los videos de sus padres cuando eran recién casados, dándose cuenta que las imágenes filmadas en ese formato, guardan un rastro de algo más profundo, algo un tanto oscuro que se respira en un momento que parecería ser cotidiano. Entonces imagina lo que sería encontrar en una casa abandonada una caja de cartuchos donde se revelara una historia de terror vivida en los setentas. Así nace 1974, como una búsqueda por retratar el horror y la angustia que una pareja vive ante el acecho de lo desconocido. Proponiendo una narrativa cinematográfica que está dada por los cortes de la memoria, haciendo visible lo que los personajes viven en un ámbito de percepción más allá de lo que queda registrado en la cámara.

 

 

 


8MM
 

 

"Con 1974, quise hacer una fusión entre la narrativa del found footage y la ficción cinematográfica. Utilizando el nivel de realismo e intimidad que ofrece la narración en primera persona, pero incluyendo herramientas narrativas y estéticas que nos permiten explorar otros estados de percepción".

“No quería contar una historia recreada en los setentas, quería contar una historia como si ésta hubiera sido realmente filmada por una pareja en 1974 en México, y hoy escaneáramos ese material fílmico que se mantuvo guardado por más de cuatro décadas. Para lograr ese tratamiento visual, era fundamental filmar en 8mm y, por ende, cada elemento de la película tenía que ser original de la época. De esta forma, el espectador podría viajar a través del tiempo —alejándose de lo que ve y vive en su cotidianidad—, para adentrarse en una atmósfera íntima y presenciar en primera persona la tensión y terror de lo desconocido. También me era importante contar la historia de manera fragmentada y con cortes abruptos, haciendo alusión a la manera en la que los recuerdos se guardan en la memoria.



Filmar en 8mm implicó muchos retos, las cámaras son extremadamente ruidosas, el grano es muy pesado —haciendo casi imposible la integración de efectos visuales sobre el material granulado—, los cartuchos tienen una duración efectiva de aproximadamente dos minutos, y en ese entonces las cámaras de 8mm no tenían salida para ver la imagen en un monitor, sumando que el tiempo y presupuesto eran muy cortos para filmar, mandar a revelar el material y utilizarlo como guía para ver el resultado de las tomas; todo esto aunado a que tampoco sabíamos cómo se vería el grano en la escala de una pantalla de cine. Fui con el fotógrafo a un lugar especializado en Los Ángeles, Pro 8mm, compramos la cámara que hacía menos ruido y la modificamos para cambiar la relación de aspecto de 4:3 a 16:9 para lograr el formato rectangular de las pantallas. Cuando llegamos al set nos dimos cuenta que el ruido de la cámara era mucho peor de lo que creíamos, interfería excesivamente con el boom y el lavalier; corrimos las primeras pruebas de sonido directo por un programa de edición de audio y vimos que sería imposible eliminar del todo el ruido que generaba la cámara, pero decidí seguir con el rodaje. Como no tenía video assist —y sólo teníamos presupuesto para hacer tres tiros por toma—, usamos una cámara digital para definir el encuadre, el movimiento de cámara y la coreografía de los actores; una vez que todos los elementos estaban en su lugar, filmábamos con la cámara de 8mm. Mi atención estaba en la sensación que me daban de los actores, todos en el set teníamos claro hacia dónde íbamos y confiaba plenamente en el fotógrafo, pero al no tener monitor... no sabía si realmente lo que yo estaba viendo y lo que habíamos ensayado se iba a ver igual en pantalla.

 

“Fueron 3 años de post producción para llegar a ver lo que es 1974... un material fílmico que quizá sí sucedió en los setentas”.

Terminando el rodaje fuimos a Los Ángeles a revelar el material, y ahí me di cuenta que las distintas ASAS que habíamos utilizado daban una calidad de grano muy distinta entre cada toma, gran parte de la película tenía una aberración y se dibujaba una viñeta negra alrededor de algunas tomas. También me di cuenta que el lente, la distancia focal y la cantidad de luz que la cámara de 8mm capta, es completamente diferente a la cámara digital con la que habíamos hecho los ensayos; por lo tanto, me encontré con una película diferente a la que creí haber filmado. Esto me llevó a realizar tres re–shoots exhaustivos, hasta que tuve en mis manos la película que visualmente había buscado desde un inicio. Con respecto al sonido directo, muy pocas tomas funcionaron... la cámara emitía diferentes ruidos que por momentos se agudizaban y que además variaban dependiendo de la distancia con los actores, por lo cual nos vimos obligados a hacer ADR del 70% de la película".

 

 

 

SONIDO

&

MÚSICA


 

"Yo quería que la fuente de terror hablara con la fuerza de su origen, graves desolados, sonidos profundos que trazaran los niveles de la angustia, silencios amenazantes y sonidos que también revelaran la fuente creadora que habita en cada uno de nosotros..."

 

¿Cómo dar cuenta de lo desconocido sino a través de su presencia sonora? En 1974, el sonido y la música son elementos fundamentales donde se traza la narrativa entre la presencia invisible de lo desconocido y el interior de los personajes: “El acecho y la seducción tenían que estar presentes durante toda la película, haciendo visible la experiencia que como humanos tenemos ante lo desconocido, eso que por un lado puede ser siniestro —activando nuestros modos de supervivencia— pero que a su vez nos conecta con el origen que nos mantiene vivos. Siempre me ha interesado lo subliminal, todo eso que percibimos aunque la mente no dé cuenta de ello, y quería que el sonido fuera la vía directa por la cual pudiera entablar una conversación con el subconsciente del espectador. Busqué diferentes vías por donde esa fuente de horror pudiera hacerse presente en la vida de los personajes, sin delatar su origen; las vías que utilicé fueron el teléfono, la radio, la televisión e incluso la cámara. Para dar voz a la presencia acechadora en cada vía, exploramos sonidos particulares y distorsionados de todo aquello que desde niños nos causaba terror: rugidos, llantos, llamadas de apareamiento, uñas rasgando paredes, sonidos de máquinas e instrumentos médicos, por mencionar algunos; pero también nos detuvimos a escuchar y traducir la fuerza creadora que resuena en nosotros, logrando a través de distintas capas un movimiento envolvente, originario. En este sentido, la música no podía ser la fuente de terror, sino lo que señala la experiencia que tienen los personajes ante una presencia desconocida. Para traducir esa experiencia interior, la música fue creada con objetos cotidianos como unicel, cortinas, cuernos, copas y unos cuantos instrumentos musicales; se utilizó todo aquello que pudiera dar voz al miedo, a la incertidumbre, en general a la experiencia humana frente a todo lo que no conoce”. En 1974, el sonido es una fuerza inminente que constantemente llama, colocándonos en el límite de la incertidumbre donde se abre un cuestionamiento que borra la línea entre el horror de lo siniestro y el horror de las fuerzas creadoras.

 

 

 

 

CAST

&

CREW


 

 

DIRECTOR

Victor Dryere

 


PRODUCTORES

Victor Dryere
Omar Noceda
Fernando Barreda
Fausto Muñoz
Pablo Guisa K.

 

guióN

Victor Dryere
 

 

COMPAÑÍAS PRODUCTORAS

Nemesis Films
Plataforma A&C
CONARTE

 

edicIÓN

Daniel Livas
Victor Dryere

 

CAST

Diana Bovio
Rolando Breme
Guillermo Callahan
Blanca Alarcón

 

MÚSICA

Enrico Chapela 


 

EFECTOS
VISUALES

Pablo Ángeles
Edgar Patrón 

 

sonido

Uriel Villalobos 

 


DIRECCIÓn
DE ARTE

Mirtha de la Garza 

 

FOTOGRAFÍA

Guillermo Garza 

 


DISEÑO DE VESTUARIO

Nayeli de Alba
 


EFECTOS DE MAQUILLAJE

Ruy Oviedo
Alberto Sánchez